Jarra de loza quebrada, Es difícil identificar por los pocos trabajos de investigación que existen sobre las piezas que han servido para rellenar bóvedas de Monasterios, conventos, iglesias, graneros o palacios. Para el relleno de las bóvedas se buscaban en los mas cercanos o famosos alfares cualquier pieza quebrada bien en el horno o posterior, y a veces en monasterios como el de Santa Clara de Moguer (Huelva) aparecen piezas de los siglos entre XVI-XVIII que pudieran ser de Sevilla, Málaga o cualquier otro centro. Dependiendo de la envergadura de la obra, las piezas podían ser de mayor tamaño o menor, encontrando en ellos desde tinajas, cantaros, anafes, ollas, perulas, cantimploras, jarras, cangilones, morteros, bacines, jarros, cantarillos, etc. Aparte del poco cuidado con el que se recuperaron estas piezas de loza quebrada entre los años 70 y 90 ya eran piezas defectuosas y rotas desde su creación, pero nos dan una visión muy cercana de las características y tipológicas de los cacharros de barros en siglos pasados.
Medidas: 31,00 ctms. de alta, 23,00 ctms. de ancha por lo mas, 13,00 ctms. de boca y 13,50 ctms. de base.
Nº 2.607